¿Existe realmente una regresión del sueño a los 4 meses?

¿Existe realmente una regresión del sueño a los 4 meses?

Como consultora certificada en sueño infantil, escucho el término “regresión” utilizado en relación con casi todas las circunstancias imaginables. Esencialmente, si el bebé no duerme bien por un par de noches, los padres comienzan a referirse a cualquier cambio como una regresión. Algunas personas suscriben la idea de que hay una regresión a los ocho meses, una regresión a los nueve meses, una regresión al año, así como regresiones por dientes, regresiones por crecimiento, y la lista continua. Otros ven esto como simples contratiempos causados ​​por circunstancias atenuantes.

Con respecto a la regresión de los cuatro meses, hay un consenso en que se da, y por una buena razón. Es un cambio verdadero y es permanente.

Para comprender qué le está pasando al bebé durante esta etapa, primero necesitamos saber algunas cosas sobre el sueño en general. Así que aquí está la ciencia detrás de esto, contada en lenguaje sencillo.

Muchos de nosotros pensamos en el sueño como una situación intermitente. Estás dormido o no lo estás. Pero el sueño en realidad tiene varias etapas diferentes, y forman el “ciclo del sueño”, que atravesamos varias veces durante la noche.

La etapa 1 es esa etapa inicial conocida como adormecimiento, es algo que todos conocemos y la hemos sentido cuando estamos muy cansados y entramos en un estado de somnolencia, pero realmente no distingues que te has quedado dormido.

La etapa 2 se considera la primera etapa de “sueño real”. Aquí es donde las personas tienden a darse cuenta, una vez que se despiertan, que en realidad estaban durmiendo. Para cualquiera que tome un “power nap”, esto es tan profundo como quieres que sea el sueño en tu siesta, o te vas a despertar mareado, desconcertado y cansado.

La etapa 3 se conoce como la fase de transición hacia el sueño profundo. Las palpitaciones y el ritmo cardiaco van disminuyendo.

La etapa 4 es una fase profunda y regenerativa. También conocido como “sueño delta” por el tipo de onda que se produce durante esta etapa. Aquí es donde el cuerpo comienza a reparar y rejuvenecer el sistema inmune, el tejido muscular, las reservas de energía, el crecimiento y el desarrollo. Es muy difícil despertarnos en este punto.

Estas cuatro etapas componen el sueño NO REM

La etapa 5 es el sueño REM (Rapid Eye Movement). Aquí es donde el cerebro comienza a activarse y consolida la información y los recuerdos del día anterior por ende hay mucha actividad a nivel cerebral y es donde por lo general soñamos y desarrollamos la memoria y el aprendizaje.

Una vez que hemos pasado por todas las etapas, o nos levantamos por breves segundos o nos acercamos a despertar, y luego comenzamos nuevamente el ciclo, así hasta que la alarma del despertador suena por la mañana.

¿Qué tiene esto que ver con la temida regresión de la que estábamos hablando originalmente?

Bueno, los recién nacidos solo tienen 2 etapas de sueño; sueño profundo y REM, y pasan aproximadamente la mitad de su sueño en cada etapa. Pero alrededor del cuarto mes, hay una reorganización del sueño, ya que adoptan el método de dormir en 5 etapas que seguirán por el resto de sus vidas. Cuando se produce este cambio, el bebé pasa del 50% de sueño REM al 25% y así dejar espacio para incorporar las primeras etapas. Entonces, aunque el sueño REM es liviano, no es tan ligero como estas nuevas etapas. Ahora pasará más tiempo en un sueño más ligero, por lo que hay más posibilidad de que el bebé se despierte. Eso no quiere decir que queremos prevenir o evitar que esto suceda.Despertar es absolutamente natural, y todos lo hacemos entre 2 y 5 veces por noche.

A diferencia del bebé, como adultos podemos identificar ciertas verdades reconfortantes cuando nos despertamos en la noche. Podemos reconocer que, “estoy en mi cama, todo está bien, todavía es de noche, mi alarma no va a sonar aún, puedo volver a dormir”Y lo hacemos por lo general tan rápido que a la mañana siguiente ni siquiera recordamos esos breves despertares. A los cuatro meses, por supuesto, se carece de estas habilidades de pensamiento crítico. Para un bebé alrededor de esta edad, que se durmió en el pecho de su madre, el razonamiento podría ser mucho más parecido a: ” Lo último que recuerdo es una cara familiar, estaba cenando y alguien estaba cantando. Ahora estoy solo en esta habitación obscura, no hay comida, y no se en que momento pase de un lado a otro”.Ahora que el bebé se ha dado cuenta, de repente, de que mamá no está cerca, y no está del todo seguro de dónde se ha ido, la respuesta natural es empezar a llorar y después de eso el bebé no vuelve a dormirse hasta sentirse seguro y tranquilo de que todo está bien.

El otro gran contribuyente a esta crisis de los 4 meses, es que hasta este momento, por lo general, los padres han estado durmiendo a sus bebés con un chupón, o meciéndolos, o amamantándolos, o alguna técnica similar. Básicamente el bebé está recibiendo todo tipo de “ayuda” para que pueda conciliar el sueño y por el contrario no ha tenido oportunidad de experimentar haciéndolo por si mismo. Ahora que pasa más tiempo en un sueño ligero y, por lo tanto, tiene una mayor probabilidad de despertarse, esto de repente se convierte en un problema mucho más grande. Estos apoyos para dormir o las asociaciones para conciliar el sueño, pueden ser un arma de doble filo. Son útiles para llevar a tu bebé a dormir inicialmente, sin embargo la falta de ellos cuando se despierta significa que el bebé no puede volver a dormirse nuevamente sin alguna ayuda externa, escalando el llanto y la adrenalina. Cuando esto comienza a ocurrir cada media hora, los padres pueden encontrarse en una situación muy difícil y agotadora.

La buena noticia para cualquiera que experimente la temida regresión del sueño de los cuatro meses es que esta en realidad no es una regresión. Una regresión se define como “reversión a un nivel mental o conductual anterior”, y eso es realmente lo contrario de lo que el bebé está experimentando. Esto podría ser mejor definido como la “progresión del sueño de los cuatro meses”.

Ahora la gran pregunta es, ¿qué puedes hacer para ayudar a tu pequeño a adaptarse?Primero, obscurece la habitación. Puedes pensar que la habitación del bebé es lo suficientemente obscura, o que al bebé no le gusta la obscuridad, y que es reconfortante tener un poco de luz entrando por las ventanas o entrando desde el pasillo. En este caso, no.La habitación del bebé debe estar obscura y con eso me refiero a que no puedas ver la palma de tu mano, así de obscura. Los recién nacidos y los bebés no le temen a la oscuridad, lo que si hacen es responder a la luz. Esta les dice a sus cerebros que es hora de actividad y de entrar en estado de alerta, y el cerebro segrega hormonas en consecuencia. Por esta razón queremos mantener ese cuarto completamente negro durante las siestas y la hora de acostarse.

El otro enemigo del sueño diurno es el ruido. Ya sea que alguien toque el timbre, el perro del vecino no para de ladrar o que algo caiga al suelo a tres habitaciones de distancia, con el bebé pasando más tiempo en un sueño ligero, los ruidos los asustan fácilmente y se despiertan. Para esto el uso de ruidos blancos es una buena alternativa. Muchas veces cuando lo sugiero me preguntan inmediatamente, ¿esto no sería fomentar una asociación? De alguna manera si lo es, pero es una asociación positiva, es decir no requiere un reinicio, volver a poner algo o presencia de alguien más. Está justo allí y puede estar encendido mientras el bebé esté durmiendo, por lo que no es un elemento que debamos evitar. Si ayuda, bienvenido sea.

Finalmente si observas que el bebé se pone irritable antes de acostarse, probablemente haya pasado más tiempo despierto del que puede tolerar. En realidad, los bebés de cuatro meses solo deberían pasar hasta dos horas despiertos entre cada siesta, y la hora de acostarse debería ser entre las siete y las ocho de la noche para que tengan el descanso que necesitan.

Habrá regresiones reales más adelante en la vida de tu pequeño. Viajes, enfermedades, dientes, cambios en su vida que pueden hacer que tu bebé tenga algunas malas noches seguidas. Pero cuando se trata de la “progresión” de los cuatro meses, esto es algo que ocurre una sola vez. El momento que hayas superado esto, tu bebé se habrá trasladado oficialmente al ciclo de sueño que seguirá durante el resto de su vida.

Si no has estado trabajando para mejorar el sueño de tu bebé esta es una buena oportunidad para enseñarle y permitirle desarrollar las habilidades que necesita para conectar ciclos de sueño, de forma independiente, sin accesorios, sin necesidad de lactar, pasear o chupones. Le estarás dando un regalo que disfrutará el resto de su vida. Por supuesto que no todos los bebés son iguales, algunos van a llevar este proceso con total facilidad, y otros serán un poco más resistentes. Si el tuyo es de los primeros considérate afortunada y continua disfrutando de las buenas noches, para aquellos que están del lado de los resistentes, estaré feliz de ayudar. Espero haber podido aclararles un poco más el panorama con respecto a este tema.

Que tengan un buen descanso.

Emilia

Autor

Emilia Ponce

Fecha

20 Noviembre 2019

Tags

Sueño